Me limito a no mirarte.
Menos a intuirte…
con tu latido arrítmico, bajo un celestial frenesí de dos alas que no te asimilan
Después de los minutos
antes de las horas, esa dirección inequívoca que da a todos los abismos.
Menos a intuirte…
con tu latido arrítmico, bajo un celestial frenesí de dos alas que no te asimilan
Después de los minutos
antes de las horas, esa dirección inequívoca que da a todos los abismos.